El ministro israelí de Patrimonio del gobierno de Netanyahu, el ultraderechista Amichai Eliyahu, ha sugerido que el lanzamiento de una bomba atómica contra la Franja de Gaza podría ser una de las opciones en la guerra que enfrenta a Israel con el grupo islamista Hamás desde el pasado 7 de octubre. Según el diario The Times of Israel, Eliyahu hizo esta declaración en una entrevista en la radio, donde afirmó que “no hay lugar para la Franja de Gaza” y que «cualquiera que levante la bandera de Hamás no debería seguir viviendo en la tierra». El ministro, al igual que otros ministros del gobierno de Israel, también se mostró contrario a dejar entrar la ayuda humanitaria en el enclave palestino y comparó a los gazatíes con los nazis.
Las palabras de Eliyahu han causado una gran indignación y rechazo tanto dentro como fuera de Israel, y han obligado al primer ministro Benjamin Netanyahu a desautorizarlo públicamente. Netanyahu ha dicho que las declaraciones de Eliyahu “están alejadas de la realidad” y que el Ejército israelí actúa «de acuerdo con los más altos estándares del derecho internacional». Sin embargo, muchos críticos acusan a Netanyahu de haber formado un gobierno con ministros radicales como Eliyahu, que ponen en peligro la paz y la seguridad en la región.
Pero, lo paradójico y trágico de esta situación, es que desde el 14 de octubre hasta hoy han caído más de 2000 bombas que superan la tonelada de explosivos cada una sobre la franja de Gaza, que ha causado una destrucción superior a dos bombas nucleares como las que EEUU arrojó sobre Hiroshima.
Por otro, es relevante destacar que tanto la propuesta del ministro Amichai Eliyahu como las reacciones del gabinete de Netanyahu, dan a entender que se afirma de forma oficial que Israel posee bombas atómicas, algo que Israel nunca confirmó ni desmintió hasta ahora.